19 mar 2011

SENDERISMO POR LA VÍA VERDE DE LA SIERRA NORTE DE SEVILLA. TRAMO DEL CERRO DEL HIERRO



SÁBADO DÍA 19/03/2011

clip_image001


Sobre las 09:45 de la mañana de este bonito sábado de primavera, aunque aún faltaban dos días para el comienzo de la estación, Ana, Spencer y yo, llegábamos a San Nicolás del Puerto, el pueblo más pequeño de la Sierra Norte de Sevilla,  tras recorrer los 107 km. de distancia que nos separaban desde casa.
Nos fuimos a buscar un bar para desayunar, sólo estaba abierto uno (aunque más tarde nos enteraríamos que había otro, El Venero, en pleno corazón del nacimiento del río Hueznar, más cerca del comienzo de nuestra ruta), así que tomamos el desayuno en Bar Higinio Avda. del Huéznar 5, este señor, sin mucho estrés, nos puso café y tostadas con manteca colorá y zurrapa de lomo a 1,50 € cada una.
Nuestra sorpresa fue cuando vimos que nuestros móviles no tenían cobertura en el pueblo, sólo operaban Vodafone y Movistar, así que nosotros al ser de otro operador no teníamos forma de hablar con Manuela, integrante de la Asociación Andalus con la que habíamos contactado por Internet para unirnos a ellos y hacer una ruta de senderismo.
Una buena persona cliente del bar que nos estaba escuchando, se ofreció a prestarnos su teléfono móvil, ya que en el establecimiento del Sr. Higinio tampoco había teléfono fijo. Por fin pudimos contactar con Manuela y aún les quedaba un ratito de camino así que los esperaríamos en la gasolinera a la entrada del pueblo.
Después de encontrarnos con ellos, como tenían que ir a desayunar al bar Higinio, nos hizo suponer que tardarían un buen rato y nos daba tiempo a ver el nacimiento del río Hueznar que se encuentra enfrente de la gasolinera, es decir justo a la izquierda de la entrada del pueblo, zona donde dejamos nuestros vehículos  estacionados  hasta la vuelta de nuestra ruta.
Allí nos encontramos que el paraje estaba un poco masificado, nada tranquilo, pues también habían decidido ese lugar para pasar el día un grupo numeroso de excursiones de mujeres pertenecientes a distintos ayuntamientos conmemorando el día de la mujer y patrocinado por Aguas del Hueznar, allí en el merendero del área recreativa, estaban tomando sus desayunos y portando las camisetas publicitarias que les habían entregado a la entrada.
A pesar del inconveniente que expongo y que para mí no era sorpresa pues en ese lugar justamente ya había estado en otra ocasión, es maravilloso ver de nuevo como emana el agua de la tierra por diferentes puntos, el rebosadero de un acuífero del que emergen miles de burbujas, andando entre las pasarelas se ve  como va corriendo a distintos niveles formando pequeñas cascadas de agua limpia y fresca hasta llegar a lo largo de su transcurso a convertirse en toda una ribera.
Regresados del desayuno y terminadas con las presentaciones previas, iniciamos nuestra ruta por la Vía Verde de la Sierra Norte, esta en concreto abarca 18 kmts que van desde la Estación de Cazalla- Constantina hasta el Cerro del Hierro. Nosotros la tomamos en el tramo final que va desde la carretera SE-163 que procede de Constantina (entrada del pueblo de San Nicolás a la derecha) hasta el Cerro del Hierro. En total entre ida y vuelta andaríamos aproximadamente unos 18 kmts.
P3199157
El camino era muy cómodo pues es el que ha habilitado la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía aprovechando el trazado ferroviario minero que unía la bifurcación de los Prados con las minas del Cerro del Hierro. Es de un piso limpio de una anchura ideal como sendero, pero un poco complicada para el senderista de a pie por tener que compartirlo con los ciclistas, sobre todo a la vuelta ya que son bastaste los que utilizan este medio para hacer en su mayoría, el recorrido completo.
Este soleado día obligaba a ir desechando capas de ropa según iban corriendo kmts. El camino fue muy agradable, aparte de ver en buena parte de él una hilera importante de pequeñas margaritas que daban colorido y anunciaban la primavera, también pudimos divisar algunas cigüeñas negras, especie amenazada en extinción, pero sobre todo tengo que realzar la amabilidad y acogida del grupo, fueron encantadores para no conocernos de nada, charlando a veces con unos y a veces con otros se hizo más ameno y llevadera la ruta, seríamos aproximadamente unos 17 si no me olvido de nadie ah! y 5 perros, sí cinco hermosos perros que no entiendo de razas pero eran grandes, que disfrutaron de lo lindo aprovechando cualquier charquito para revolcarse, y que también alguno de ellos mostró su cansancio al terminar quedando tendido en el suelo rendido después del largo recorrido.
   P3199155
P3199163
Restos de los montacargas, escombreras y otras instalaciones fabriles nos anuncian el inicio del coto minero del Cerro del Hierro (en el km. 15,5 de la vía), al que se accede por la zona del antiguo poblado minero, hoy barriada de San Nicolás, donde todavía residen algunos de los mineros que trabajaron en la explotación minera.
Al poco de entrar en esta zona, a la derecha se ve la capilla-escuela del barrio, de claro sabor británico. Y es que una compañía escocesa, la William Braird Mining and Co. Ltd., de Glasgow, fue quien explotó desde la postrimerías del siglo XIX este yacimiento. Ingenieros y directivos residían allí también junto a la explotación minera, prueba de ellos son los restos de varias residencias también de marcado estilo inglés colonial que se conocen en el lugar como “Las Casas de los Ingleses”.
P3199154
P3199159
Al final del recorrido, nos encontramos la perla paisajística de esta vía, en el tercer posible acceso a la vía: las calizas del Cerro del Hierro, que se levantan majestuosas dando como resultado un singular paisaje de caprichosas formaciones rocosas con aristas y bordes angulosos, generando un espacio casi mágico que hace más de 550 millones de años se correspondía con un extenso mar.
Al final de la vía verde hay una gran explanada con merenderos y arboles que dan una magnífica sombra para tomar el merecido almuerzo y descansar un rato, cosa que hicimos más tarde después de subir al resto del tramo, que ya era camino de tierra pero también muy cómodo y bien acondicionado con sus vayas de madera y recorridos claramente indicados.
El entorno gana un cierto dramatismo por los restos abandonados de la actividad minera, con sus cargaderos, ferrocarriles, rampas, escombreras... que aportan el sabor de arqueología industrial y enriquecen las oportunidades de diversión, aventura y conocimiento del medio natural que ofrece la Vía Verde de la Sierra Norte de Sevilla.
En este tramo final donde están las concentraciones rocosas, se encuentran varios miradores preparados con bancos para descansar donde se puede admirar la panorámica del paisaje. Había algunos tramos con carteles de “prohibido el paso por desprendimientos”, al principio lo respetamos pero como vimos que no había otro acceso y que alguna gente había hecho caso omiso a los carteles, decidimos intentarlo a ver qué nos encontrábamos, aparte de un pequeño tramo donde había que tener precaución por derrumbamiento, el riesgo mereció la pena, nos hubiéramos perdido la parte más bonita.
Un estrecho camino nos introduce en una zona donde el cambio de temperatura fue notable, lleno de vegetación y restos de las instalaciones ruinosas así como grandes rocas a modo de túnel o desfiladero que no pude evitar el que me recordara al desfiladero de Petra o las montañas de los pilares de la sabiduría en Wadi Rum de Jordania, así como otros caminos donde el sol resaltaba el brillo del hierro en las piedras que hacían parecer brillantes.
P3199160
P3199161
P3199162
P3199164
P3199165
P3199166
P3199167
P3199168
P3199169
P3199170
P3199171
P3199172
P3199174
P3199175
    P3199177P3199178
  P3199179P3199180
P3199181
P3199182
P3199183
Hecho este recorrido volvimos a la explanada del merendero donde tomamos nuestro bocata y después de descansar un rato, emprendimos el camino de vuelta, para mí al menos, no senderista habitual, en los últimos kmts. ya notaba un poco el cansancio en las piernas pero sobre todo en la espalda del peso de la mochila que era pequeña para evitar meterle mucho peso pero aún así aunque lleve lo imprescindible tras un montón de kmts. con ella a cuestas termina pesando. Después de las despedidas oportunas cogimos el coche y emprendimos el camino de vuelta, parando el El Pedroso a tomar un cafelito y como no, con una copita de aguardiente de guindas con hielo riquísimo para que Spencer, interesado por él, no se fuera de nuestra tierra sin probar este rico licor de la Sierra Norte Sevillana.
Un poco de agujetas en los días siguientes, si aparecen,  no harán más que recordarme la experiencia del sábado y el maravilloso día vivido con Manuela, Flor, Fran, Ángela, Ángel, Manolo y….. bueno, no recuerdo el nombre de todos, perdonar los que me olvido. Muchas gracias por vuestra acogida y el fantástico día pasado con vosotros espero que se repita pero no me atrevo a apuntarme a vuestra siguiente ruta de 35 kmts. mientras no esté más ejercitada.
También a ti Spencer que aunque partimos del mismo sitio te conocí ese día, gracias por ser como eres, tan abierto, tan simpático, amable, educado y por querer tanto a nuestra tierra y haberte adaptado tan fácilmente a una cultura tan diferente a la tuya.


P3199152
P3199173

5 mar 2011

FIN DE SEMANA EN MADRID, CHINCHÓN, SEGOVIA Y ÁVILA

 
Del 25 al 28/02/2011
CAPÍTULO I - MADRID Y CHINCHÓN.

A las 13:00 horas del viernes, nos poníamos en camino rumbo a Madrid aprovechando que el lunes 28 era fiesta en nuestra comunidad y teníamos un día más que un fin de semana normal.
 
El motivo principal de nuestro viaje era visitar en Madrid a Juanjo y Mª José, pareja que conocimos en el viaje a Argentina en noviembre/2009. Habíamos congeniado tan bien que estábamos planeando hacer juntos un viaje a Sicilia para el próximo mes de abril y además de pasar un día con ellos, teníamos que concretar algunos puntos acerca del viaje.
 
Después de parar en tres ocasiones para comer, descansar y café, eran las 7:30 de la tarde cuando estábamos llegando a su casa en un barrio a las afueras de Madrid capital.
 
El camino, por la ruta de la Plata muy bueno, 542 kmts de puerta a puerta, todo autovía que por ese motivo era monótono y aburrido.
 
A la mañana siguiente, ya que los dos conocíamos Madrid, nuestros amigos habían planeado llevarnos a Chinchón que ninguno de nosotros habíamos estado nunca.
 
Chinchón es un pueblo de la Comunidad de Madrid situado a unos 45 kmts. de la capital con un casco urbano lleno de atractivos turísticos, una amplia gama de productos típicos, tales como el famoso anís de Chinchón, artesanía en mimbre y esparto, panes, tortas y dulces muy diferentes, legumbres castellanas y ajos tanto los normales como los tiernos en ramilletes, entre otros muchos. Importante también por su gastronomía en los numerosos mesones y restaurantes que se encuentran distribuidos por todo el pueblo.
 
Al llegar a Chinchón y después de aparcar, tarea algo complicada, nos dirigimos a la Plaza Mayor, joya de la comarca y que recientemente ha sido declarada 4ª maravilla material de la Comunidad de Madrid.
 
Al llegar, nos encontramos en ella un mercadillo que con sus correspondientes puestos y furgonetas le quitaban parte del encanto a la misma, pero supongo que eso lo harán una vez por semana y tuvimos la mala suerte de que nos tocó ese día, como también imagino que eso será cada sábado, desde aquí aprovecho para sugerir a las autoridades de Chinchón que podían cambiar el día del mercadillo a otro fuera del fin de semana ya que son estos días los que podemos ir los turistas y nos da mucha pena llevarnos esa imagen y no la de la plaza vacía como un coso o lleno de veladores para disfrutar más del entorno.
 
Aparte de mis pequeñas críticas tengo que decir que me pareció espectacular, en su conjunto la plaza está soportada y cerrada por construcciones de tres plantas y balcones de madera, denominados “claros”, la mayoría ocupados por restaurantes.
 
Antiguamente era un lugar de encuentro donde se celebraban las ferias de ganado. El concejo compra unas casas en 1499 para acometer sus reuniones, estableciéndose el Ayuntamiento en el mismo lugar en el que se encuentra en la actualidad.
 
En 1502, la vistan Juana la Loca y Felipe el Hermoso y en 1683 queda cerrada abriéndose huecos suficientes para dejar paso a procesiones y carros.
 
Ha sido utilizada como corral de comedias, juego de cañas, autos sacramentales y celebraciones taurinas así como escenarios de varias películas.
 
  DSC_0174DSC_0175
DSC_0152
DSC_0149
DSC_0155
DSC_0163
DSC_0150
DSC_0153
DSC_0167
DSC_0168
DSC_0169DSC_0176
Vista de la Plaza Mayor desde el mirador de la Iglesia de la Asunción
DSC_0158
DSC_0159
Seguimos nuestro recorrido turístico por la Iglesia de Ntra. Sra. de la Asunción, recientemente restaurada con su piedra blanca, se encuentra en todo lo alto coronando la Plaza Mayor. En su altar principal se encuentra un lienzo de Francisco de Goya que realizó especialmente para decorarla a petición de su hermano, por entonces capellán de esta iglesia, lástima que estaba cerrada y no pudimos visitarla por dentro ya que sólo la abren a la hora de los cultos.
 
Justo al lado se encuentran el Teatro Lope de Vega y  la Torre del reloj, correspondiente a la iglesia de Ntra. Sra. de Gracia, la más antigua de Chinchón, destruida durante la Guerra de la Independencia, salvándose únicamente la torre, por ese motivo se dice que Chinchón tiene una torre sin iglesia y una iglesia sin torre.
 
DSC_0177-1    DSC_0161
DSC_0160
Al bajar visitamos la oficina de información turística que se encuentra ubicada en los antiguos lavaderos, nos sentamos en uno de los muchos veladores que había en la Plaza Mayor a tomar una cervecita disfrutando del buen día que teníamos así como del entorno.
DSC_0164
Aún nos quedaban muchas más cosas que ver de Chinchón, El Castillo de los Condes, los Conventos, las muchas ermitas que tiene, etc., pero ya el tiempo no daba para más, teníamos cita en un restaurante para comer, así que el resto quedaría para otra visita.
 
Comercio de artesanía y rincón típico

        DSC_0154  DSC_0156
El almuerzo lo hicimos en un mesón llamado “Mesón Cuevas del vino en C/. Benito Hortelano, 13. El Restaurante era enorme, inmenso que a pesar de la cantidad de comensales que había tenía un servicio rápido. El lugar era muy pintoresco con toda la decoración intacta de cuando eran bodega y producían su propio vino, podéis ver más detalles pinchando en el enlace. Comimos un plato de cordero riquísimo junto con otros entrantes para compartir.
DSC_0172
 
Al terminar visitamos sus bodegas en el sótano y vimos el decorado con fotografías que tienen en las paredes de la gran cantidad de personajes famosos que han pasado por allí, un sitio con mucha historia.
 
DSC_0173
Volvimos de nuevo a la Plaza Mayor para comprar algunos de los artículos típicos que he mencionado antes.
 
Llegó la hora de regresar a Madrid ya que Juanjo tenía entradas para ver el partido Atlético de Madrid – Sevilla F.C. que casualmente coincidían ese día y cada uno de ellos era de uno de esos equipos, “esperemos que no llegue la sangre al río” fue la despedida de Mª José y mía y que en las dos horas de partido aprovechamos para tomarnos un café.
 
Como recientemente ambas habíamos leído el libro “El tiempo entre costuras” y los escenarios se desarrollaban entre Marruecos y Madrid, nos quisimos sentir por un rato Sira, su protagonista, y elegimos el Embasy en Paseo de la Castellana, nº 12 para tomarnos ese café con pastas riquísimas aunque era muy diferente de como me lo había imaginado, desconozco si en los tiempos de la posguerra que es la época en la que se sitúa el libro era tal como lo describe, María Dueñas,  y con el paso de los años ha sufrido algunas transformaciones o es que fue pura invención de la autora.
 
Acabado el partido y después de recoger a los futboleros, que por cierto,  terminó con un empate para que los sentimientos quedaran compensados, nos fuimos para el centro, donde después de aparcar enfrente del Teatro La latina, estuvimos dando un paseo por toda la zona, La Parroquia de San Andrés y alrededores, pasando por la Calle Cava Baja donde nos tomamos unos exquisitos huevos rotos enfrente del famoso Casa Lucio, ya que en este fue imposible hacer reserva. La zona estaba ambientadísima y las calles llenas de restaurantes y bares de copas. Después, seguimos caminando hasta el recientemente abierto Mercado de San Miguel, como lugar pintoresco de tapas, terminando en la Plaza Mayor.
 
Así quedó concluido nuestro día en Madrid después de haber pasado una jornada fantástica con Juanjo y Mª José, ya que a la mañana siguiente salíamos para Segovia.
 
Ir a página principal
Ir a Capítulo II – Segovia