25 jul 2022

VIAJE DE 10 DIAS A LA PROVENZA FRANCESA: CAPÍTULO V - AVIÑON-ORANGE-ABADÍA DE SENANQUE-GORDES-ROUSILLON-AVIÑON

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Día 5º) AVIÑON-ORANGE-ABADÍA DE SENANQUE - GORDES - ROUSILLON - AVIÑON

Viernes día 15/07/2022

Como de costumbre, salimos temprano del hotel de Le Pontet, a las afueras de Aviñón y hoy nos dirigíamos a la ciudad de Orange.

Distancia desde el hotel a Orange: 24,4 kms. 24'

Orange, también llamada "Cité des Princes" (ciudad de los príncipes), fue capital del Principado de Orange, con una población en 2007 de 30.025 habitantes, es la tercera más grande en el Vaucluse después de Aviñón y Carpentras.

El antiguo centro de Orange es compacto, interesante y fácil de explorar. El centro de Orange es más como un pueblo, y se puede visitar en un rato, excluyendo una visita al Teatro Romano.

Aparcamos en el Parking Théatre Antique, regulado por parquímetro, muy cerca del Antiguo Teatro, nos dirigimos a la oficina de turismo, como hacemos siempre que llegamos a una ciudad, en esta ocasión el parking estaba un poco retirado, a pesar de haber uno junto a esta, eso nos sirvió para ir viendo algunas de sus callejuelas y monumentos importantes.

Rue Pourtoules, de camino del parking al centro , a la izquierda el anfiteatro.


En una rotonda al inicio de un ancho bulevar por donde en medio pasa la carretera D976, se ubica el Teatro de la Ópera.



Allí, en la misma puerta del teatro, se encuentra esta escultura, de reciente inauguración (julio 2019) para homenajear a las 332 víctimas, completamente borradas de la historia oficial, que fueron guillotinadas durante el régimen del Terror de la Revolución Francesa (1793-4).
(Segunda foto de google)

  
Iglesia de Saint Florent, frente al teatro antiguo. Una bonita iglesia católica en el corazón de Orange. Es hermoso su simple estilo franciscano.





El Teatro romano de Orange, construido bajo el reinado de César Augusto en el siglo I, es uno de los mejores conservados del mundo. Aún dispone del muro de fachada escénica con su elevación original: 103 metros de largo por 37 de alto.

En cuanto a su uso actual, acoge eventos como el Festival Lírico de Orange (junio-agosto) o el Festival Romano celebrado en septiembre.

Este teatro, junto con el Arco del Triunfo, el cual veríamos mas tarde, fueron declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1981.

De nosotras tres, sólo entró Ana a hacer su visita interior. No teníamos mucho tiempo en la ciudad y como he comentado en otras ocasiones, ese poco tiempo prefiero ver la ciudad por fuera, ya que he visto muchos teatros romanos en mi vida, en Italia, Grecia, España, Sicilia, Turquía, Túnez, etc.


Entrada al Teatro antiguo en rue Madeleine Roch








Después de ver los exteriores del anfiteatro, callejeamos por Orange en busca de sus murallas, iglesias, rincones y plazas.

La Orange Mairie (ayuntamiento) en la Place Clemenceau



Bonito rincón en rue Notre Dame


Cathédrale Notre-Dame-de-Nazareth

Fue construida a principios del siglo XII y reconstruida varias veces a lo largo del tiempo. Sus entradas están algo escondidas, pues está rodeada de edificios antiguos, destacando la de la fachada sur. Fue la sede del obispo de Orange y una catedral hasta 1801 cuando se convirtió en la parroquia de la ciudad.

       

Plaza Silvain


Portique ouest du forum

Se trata de una de las paredes de la principal plaza de una ciudad romana, el foro, que daba a una de las dos calles principales, el Cardo Maximus.

Se encuentra en la rue Pontillac, parte de la cual es un conjunto galorromano y renacentista declarado monumento histórico. Esta calle era, en la época medieval, un conducto de aguas residuales llamado “Pontillas”, de ahí su nombre.


Retornamos al coche y nos fuimos para el Arco del Triunfo, ya que era el monumento que quedaba un poco más alejado del centro.

Arco del triunfo

Está situado en una plaza fuera del centro histórico de la ciudad, se puede ir en coche ya que hay un aparcamiento gratuito en la plaza.

A 2,3 kms. (7') en coche exactamente y a 1,200 km (15') caminando, se encuentra la otra fabulosa pieza de herencia romana de Orange, que data del reinado de Augusto en el siglo I.

Está dedicado a los miembros de la Legión Galia que fundó Orange y luego se actualizó para incluir los éxitos militares de Germanicus y Tiberius sobre las tribus alemanas.

Fue construido a principios del siglo I d.C., con roca caliza, y es uno de los mejores ejemplos de este tipo de construcciones romanas.

Está situado en lo que era la Via Agrippa, que era una red de cuatro caminos que unían diferentes lugares de la Galia. Sus bajorrelieves representan diversas victorias de las legiones romanas y en su cara norte tenía una inscripción dedicada al emperador Tiberio, que lo reconstruyó. Son características sus columnas corintias.









  






A partir de hoy comenzaríamos a buscar parte de lo que nos había traído a esta maravillosa región, que era visitar los campos de lavanda en plena floración, así que como primer destino nos dirigimos a uno de los puntos más famosos, la Abadía de Sénanque.

Distancia desde el parking de Orange a la Abadía de Sénanque: 48,4 kms. 58'

La abadía de Nuestra Señora de Sénanque es un monumento ubicado en medio de campos de lavanda, en el fondo de un pequeño valle verde, fue fundado en 1148 por monjes cistercienses.

Estos monjes siguen estando presentes en el lugar, viviendo dentro de la más pura tradición monástica. Sus días están presididos por la oración y el trabajo, que consiste en el cultivo de la lavanda y la producción de miel.

Auténtica joya del arte románico provenzal, la abadía  constituye también uno de los testimonios más puros de la arquitectura cisterciense primitiva. La iglesia abacial, el claustro, el antiguo dormitorio, la sala capitular y el calefactorio (todos ellos construidos en los siglos XII y XII) están abiertos al público.

Nosotros no llegamos a entrar porque había que haber reservado cita previamente, sólo visitamos los campos de lavanda, la tienda y alguna dependencia en la planta alta de entrada libre.

Aunque habíamos ido en la fecha idónea para ver lavanda en plena flor (desde finales de junio a mediados de agosto), supongo que no será tan exacto y dentro de ese margen de tiempo habrá años que florezca antes y otros que lo haga después, pero a pesar de ser espectacular su vista, esperaba encontrarnos los campos mucho más morados, puede que por la luz, la época o los filtros no estaba como en las postales que había visto y esperaba encontrar.

Intenté fotografiarla desde todos los puntos posibles a ver donde se veía más morada pero no obtuvimos los resultados esperados.























































De allí nos dirigimos al cercano pueblo de Gordes, 4 kms. 9 minutos

Aparcamos en un parking que hay al llegar a la rotonda, a la entrada del pueblo, tomando la Carretera D102 y luego la 1ª a la izquierda se encuentra un amplio parking regulado, no tiene pérdida pues hay un supermercado Utile y verás aparcados los coches amarillos de la oficina postal que está muy cerca.

En la cima de Gordes y en el centro se encuentra el castillo que domina la ciudad. Construido en 1031, reforzado en 1123, fue reconstruido en 1525. 

Hoy en día, alberga el museo Pol Mara, un pintor flamenco contemporáneo que vivió en Gordes, y la oficina de información turística, con entrada por la Rue Baptistin, en una puertecita lateral del interior del castillo.

En verano hay conciertos y obras de teatro en el patio del castillo.

Nos dirigimos a la oficina de turismo, donde nos atendió un chico estupendo, en español, que nos dio importante información tanto de Gordes como de la zona, así como alguna que otra mala noticia, nos indicó que para ver los mejores Campos de lavanda teníamos que ir a Sault, cuna de la famosa planta morada, así como dos visitas que teníamos previstas tanto para esa tarde como para el día siguiente, Sendero del Ocre en Rousillon y Colorado Provenzal, ambos se encontraban cerrados por riesgo de incendios. Nuestro "gozo en un pozo"

Castillo de Gordes



En la Plaza del Castillo se encuentra la Chapelle des Pénitents Blancs. Data del siglo XVII, la capilla blanca es una galería de arte hoy en día.


Nos fuimos a comer a un restaurante en la Plaza del Castillo. Restaurante L'Estaminet, comida sencilla a base de ensaladas y pollo pero buenísima, con 3 bebidas - 69,10€



Tras la comida, retomamos la ruta para conocer el Pueblo.






Delante de la puerta de la oficina de turismo está esta bonita fuente: "La fontaine de la Place Genty Pantaly"

Fue el único punto de abastecimiento de agua de la ciudad hasta 1956. En 1957 se instaló el agua corriente en las casas. Estaba reservada al consumo común y no se permitía lavar la ropa.

La Place Genty-Pantaly, era el corazón del pueblo medieval y debe su nombre a un cocinero de la localidad de principios del s.XX.





Iglesia de San Fermín

La iglesia dedicada a San Fermín, patrón del pueblo, fue construida en el siglo XVIII.

En aquella época, la población de Gordes era numerosa y la iglesia medieval se quedó pequeña y fue demolida junto con una veintena de viviendas para hacer sitio a la iglesia actual. El imponente edificio parece una fortaleza en lo alto de la roca y da al pueblo su aspecto de ciudadela.

El interior destaca por sus paneles de madera y sus coloridos murales.

En 2017 se emprendieron trabajos de restauración para devolver a este edificio su antiguo esplendor.

  

    

  



En el plano que nos dieron en la oficina de turismo había dos rutas en función del tiempo o ganas de caminar que tuviera cada uno, la primera, señalada en color naranja, era la ruta corta de 30' de duración aproximada y la señalada en rojo era la larga de 1 hora.

Mis amigas hicieron la corta y yo muy valiente, comencé a hacer la larga, de hecho hice un buen tramo pero las cuentas de regreso y el calor insoportable no me ayudaron a completarla.

Pasé por las Cuevas o bodegas del Palacio de San Fermin, yo no sabía que es lo que era y como no vi a nadie entré, parece ser que me colé, no las llegué a ver completas pero a la salida me llamó una chica que me hablaba no se qué y como no la entendía y yo ya me marchaba no le dije nada (supongo que me estaría pidiendo que pagara la entrada). Lo poco que pude ver, impresionante.

Para los que vayan con más tiempo, es algo que se lo deben perder.

Las Bodegas del Palacio de San Fermin

Patrimonio Nacional, este lugar semitroglodita construido por el hombre y excavado en la roca, ofrece un viaje al corazón de la historia oculta de Gordes, gracias a la presencia de restos arqueológicos de las actividades del pueblo durante la Edad Media (almazara, silos, cisternas, etc.).

Bajo el Palais Saint Firmin, una gran casa renacentista, hay una red de bodegas. Desde 1999 es posible visitar la parte más representativa de la intensidad de esta actividad subterránea.

Esta red de almazaras, aljibes, tuberías, figura en el inventario complementario de Monumentos Históricos, y ofrece la oportunidad de sumergirse en la vida troglodita de Gordes.

Repartidos en siete niveles y casi 20 m de desnivel, este extraordinario conjunto cuenta con unas cincuenta bodegas, algunas de las cuales están conectadas entre sí por pasillos, escaleras; otros conducen al aire libre. Hay molinos de aceite, cisternas, un magnífico horno de pan y varias habitaciones utilizadas como almacén: todo un patrimonio relacionado con la antigua vida artesanal del pueblo.

    
  

  
Continué por mi ruta larga viendo un bonito paisaje en el horizonte así como preciosas calles y casa de piedras medievales muy bien conservadas.



    


    
   




No completé la ruta si no que volví de nuevo a la plaza del Castillo por una trocha.


Cogimos el coche y de camino para el siguiente destino Rousillon, por la carretera D15, Rte. de Cavaillon, nos paramos en un punto panorámico, donde hay aparcamiento y es donde se tienen las mejores vistas del pueblo de Gordes al completo.







Distancia de Gordes a Rousillón: 10,3 kms. 14'

Aparcamos en el parking Des Sablons, que es el primero que nos encontramos a la entrada del pueblo viniendo por la ctra. de Gordes.

Cuando llegas a Rousillon, villa famosa por sus magníficos acantilados rojos y canteras de ocre, te quedas impactado por la armonía de los colores de sus casas, todas ellas en la gama de rojos, anaranjados, marrones y amarillos, contraste llamativo con el verde de los bosques que rodean el pueblo. Ello es debido a su situación en el corazón de uno de los de los depósitos de ocre más grandes del mundo.

Posee unas callejuelas maravillosas donde gracias a la hora que era, que se encontraban pocos turistas pudimos pasear por ellas prácticamente solas y recreándonos en su arquitectura y colorido. 

Rue des Bourgades

    

Aparte de ver el pueblo, uno de los principales atractivos turísticos que tiene la zona es ver los senderos del ocre que en nuestro caso se tuvo que quedar para otra ocasión ya que según la información que nos facilitaron en la oficina de turismo de Gordes, estaba cerrado por riesgo de incendios

Sendero de los Ocres: Es un recorrido por los bosques contiguos a la villa, en el que se pueden encontrar 17 matices del material del ocre, que van desde el blanco dorado hasta el rojo púrpura, pasando por el amarillo claro, el amarillo azaftán o el terracota, entre otros. Estos pigmentos están formados por arena arcillosa y óxido de hierro. Desde finales del siglo VIII hasta la irrupción de los colores sintéticos, el municipio disfrutó de un acuerdo comercial para llevar sus pigmentos a Oriente.




Ya casi al final del pueblo, en La Burlière, donde comienza el Sendero de los Ocres, nos encontramos con esta tienda Couleur Locale, "La Compañía de los ocres" destinada a bellas artes, decoración para aficionados y profesionales, donde venden pigmentos naturales, tierras, ocres, óxidos, pigmentos orgánicos, aglutinantes, gomas, ceras, cargas y resinas, etc. pero todo un placer para la vista de los que vamos solo a mirar.





Al lado esta bonita tienda también de artículos de declaración toado en color rojizo y granate.



Aquí no nos hizo falta ir a una oficina de turismo (por la hora posiblemente estuviera cerrada pero tampoco nos preparamos nada), nos dejamos llevar por las preciosas calles del casco viejo que es pequeño y se puede descubrir todo a pie.

Avd. de la Burliere y Rue de St. Michel

  

Iglesia de St. Michel en la calle del miso nombre


Rue de St. Michel



    
Rue de St. Michel


Rue de St Michel




No me extraña que Roussillon haya sido durante décadas el reclamo de cientos de artistas que han encontrado la inspiración en aquel paisaje tan peculiar. Yo he disfrutado haciendo fotografías, cada rincón me parecía magnífico para plasmarlo en un cuadro, en mi caso en mi cámara para inmortalizar el recuerdo de esta visita.

   

 

    
   







  


Los dos pueblos visitados hoy, tanto Gordes como Rousillón, me encantaron y disfruté viéndolos porque los pude fotografiar casi sin público y sus calles no estaban repletas de bares y tiendas de souvenirs.

Retornamos a nuestro hotel en Aviñón, donde cenamos con nuestros víveres.

Distancia:  50,3 kms. 47'