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Rúa de Urzaiz
Rúa do Príncipe
Rúa de Policarpo Sanz
Rúa de Policarpo Sanz
Rúa de Policarpo Sanz
Rúa de Policarpo Sanz
Rúa de Policarpo Sanz
Rúa de Policarpo Sanz
Avda. de García Barbón
CAPÍTULO I - DÍA DE VIAJE Y VIGO
Sábado 30/12/2023
Este año, nuestra nochevieja y Año Nuevo iban a ser atípicos, en dos años, habían faltado dos miembros de la familia y estaríamos solos mi hermana, cuñado y yo, echando muchísimo de menos a los que faltaban.
Teníamos claro que en nochevieja nos iríamos a cenar a algún restaurante o pasar el fin de semana en alguna provincia cercana, pero de pronto se nos ocurrió que dada la fama que tiene Vigo de la bonita iluminación de Navidad, porqué no nos íbamos a pasarla allí, fue dicho y hecho, reservamos hotel para tres días y cena de fin de año y ni cortos ni perezosos nos fuimos para allá.
Sobre las 06:20 salimos de casa, y tras algunas paradas para desayunar, gasolina y picar algo, eran las 15:30 cuando llegábamos al hotel.
HOTEL JUNQUERA. C/ Uruguay, 19 VIGO
El hotel, a priori no estaba mal, pero habíamos hecho una reserva de una habitación triple superior y cuando llegamos a esta, lo que nos encontramos fueron tres camas seguidas, que no había espacio para moverse, ni para poner las maletas en ningún lado y no digamos el tamaño del baño, super pequeño.
Dijimos en recepción que esa no era ha habitación que habíamos contratado y nos enviaron a un edificio anexo (afortunadamente con un ascensor más grande, porque el anterior solo cabían dos personas sin maletas o una con equipaje) y bueno, esta habitación sí era un poco más amplia y el baño también.
Bajamos para picar algo, antes de que fuera más tarde, a pesar de que por la hora ya nos advirtieron que la cocina estaba cerrada pero que nos podían preparar un bocadillo, tortilla o pizza, por ejemplo.
La señora que estaba en el bar no fue muy amable y como estaba la cocina cerrada, no estaba dispuesta a ofrecernos nada.
Cuando le preguntamos por el comedor donde cenaríamos al día siguiente para tomar nuestra cena de nochevieja, nos indicó que allí al lado, o sea un espacio interior, algo oscuro donde había 3 ó 4 mesas nada más, sin la más mínima decoración navideña, nada, ni siquiera una triste guirnalda o espumillón, parece ser que con la iluminación que pone el alcalde en las calles, ellos ya estaban cumplidos. Ah, y tampoco había en ese salón televisor para tomar las uvas, llegada la hora de las campanadas teníamos que coger nuestras uvas e irnos a la zona de la barra a tomárnoslas.
Nos quedamos tristes con mal sabor de boca cuando vimos el lugar donde cenaríamos, para eso nos hubiéramos quedado en casa, y que encima pagaríamos un montante de 105€ por persona, yo no digo que la comida no lo valiera, pero el sitio no acompañaba, era deprimente.
Nos fuimos para la calle con idea de comer algo en otro lugar y comenzar a patear la ciudad y ver la iluminación conforme fuera oscureciendo y la fueran encendiendo.
Después de comernos una gigantesca hamburguesa, servida con amabilidad en el bar cafetería Ecos (Avda. de Urzaiz, 35), nos fuimos a ver la ciudad y decoración navideña
Rúa de Urzaiz
Rúa do Príncipe
Rúa do Príncipe
Rúa do Príncipe
Rúa do Príncipe
Rúa Eduardo Iglesias
Y al final de la Rúa do Príncipe, llegamos a la Puerta del Sol, la plaza más famosa de Vigo y donde se encuentra "El Sireno", el monumento más emblemático por excelencia de Vigo.
Es obra del escultor gallego Francisco Leiro y es uno de los símbolos del Vigo moderno, impresionante por su elevadísimo pedestal sobre el que se sitúa la estatua.
Porta del Sol
En dicha plaza es donde también ubican el famoso árbol de Navidad que durante algunos años ha ostentado el de mayor altura de España. Este año creo que ha quedado el tercero tras el de Badalona, Granada y Cartes en Cantabria.
El árbol de unos 44 mts. de altura, es el adorno estrella de la iluminación de Vigo. Tiene espectáculo de música y luces y se puede pasear por su interior. Su llamativa estrella alcanza casi 20 metros de altura (mayor que ningún año).
Las actuaciones musicales son cada hora a partir de las 18:30, con dos pases diferentes.
Según íbamos caminando no dejaba de rondarnos por la cabeza el sitio tan cutre donde cenaríamos la noche de Nochevieja y fuimos preguntando en cada uno de los restaurantes que nos encontrábamos, si les quedaba plazas libres para el día siguiente.
Era difícil, muchos ya estaban agotadas las reservas desde hacía meses, y por cierto rondaban todos los 90 euros, más barato que donde teníamos reservado en nuestro Hotel y en restaurantes más bonitos y mejor ubicados.
A la vuelta del paseo encontramos uno que le quedaban huecos libres y no pedían dinero para hacer la reserva, entramos y nos encantó, nada que ver con el Hotel Junquera, Restaurante típico gallego-pulpería PEREGRINUS, en Avda. Urzaiz, nº 5 muy bonito, iluminado, bien decorado y con dos televisores grandes donde podíamos verlo para tomar las uvas y personal amable. Pues nada, reservamos y después del paseo contaré la siguiente odisea.
Continuamos paseando por la rúa Policarpo Sanz, con una bonita decoración en altura, farolas... así como cada pocos metros en la zona central de la calle te encontrabas objetos preciosos para fotografiar o subirte a ellos o para los niños, como trineos, carrozas, ciervos, estrellas, personajes de cuentos, etc.
Rúa de Policarpo Sanz
Rúa de Policarpo Sanz
Rúa de Policarpo Sanz
Rúa de Policarpo Sanz
Rúa de Policarpo Sanz
Rúa de Policarpo Sanz
Rúa de Policarpo Sanz
Rúa de Policarpo Sanz
Rúa de Policarpo Sanz
Volvimos hacia la izquierda a la Rúa de colón, donde nos encontramos de golpe con la bonita decoración de la propia calle y la gigantesca noria, símbolo también de la Navidad de muchas ciudades.
Rúa de Colón
Rúa de Colón
Rúa de Colón y Fuente de la Alameda en Plaza de Comostela
Plaza de Compostela
Existe un trenecito que te va pasando por todas la calles iluminadas para que no te pierdas ninguna, hay dos recorridos, uno se toma justo en este punto, Plaza de Compostela y el otro en el de la Independencia, de esa hablaré el último día.
Funciona todos los días laborables desde las 17:00 horas has las 22:30 y del 21 de diciembre al 16 de enero hasta las 23:30 con diferentes horarios para fines de semana y festivos, eso este año, para el próximo, quien esté interesado que lo mire en página web de turismo de Vigo, no vaya a ser que lo cambien.
Para adultos el precio es de 5 euros, en principio pensamos tomarlo, pero cuando llegamos a la parada, aparte de haber una cola tremenda, no nos merecía la pena porque ya habíamos visto una parte importante de la iluminación y caminando que es mucho más divertido porque te puedes ir parando para tomar fotos.
Retomamos por la calle Colon y giramos a a izquierda por la Avda. de García Barbón, que también en su parte central estaba muy adornada con diversos objetos gigantescos como esta bonita estrella o el muñeco de nieve que se podía entrar dentro.
Avda. de García Barbón
Avda. de García Barbón
Avda. de García Barbón
De allí nos fuimos cerca de nuestro hotel, concretamente en la esquina de la Rúa Urzaiz con la avda. Gran Vía, para ver la gigantesca caja de regalos que estaba sobre la entrada de un parking, era muy bonito quedarte un rato allí mirándola porque cambiaba de colores y dibujos continuamente.
Caja regalos iluminada en esquina Rúa Urzaiz con Gran Vía
A partir de ahí la Avda. de la Gran Vía estaba adornada con estos bonitos ornamentos tan navideños.
Avda. Gran Vía
Pasando la caja de regalos y al inicio de la Gran Vía, en el bulevar central, se encuentra este espectacular monumento.
La Estatua de los rederos, también llamada Monumento al Trabajo o popularmente Los forzudos es un grupo escultórico de 1991 obra del artista orensano Ramón Conde.
Está formado por siete marineros desnudos hechos en bronce que empujan una red que sale de un mar representado por un chorro de agua a modo de fuente.
El grupo escultórico tiene una longitud de 8,50 metros; 2,50 de alto y 3 de ancho. La escultura se encuentra en una plataforma de hormigón revestida de granito, y se rodea de la fuente mencionada. Se exageró mucho el físico de los hombres para representar la fuerza y el esfuerzo de la gente del mar con una gran musculatura.
Avda. Gran Vía
A partir de aquí contaré el resto de la historia del hotel.
Nos fuimos a el Junquera y como nos daba mucho apuro decirle a las personas de recepción que el sitio no podía ser más cutre y más aun por el precio que íbamos a pagar, le dijimos que lo habíamos pensado y que ya somos mayores y comemos poco por la noche y veíamos excesiva la cantidad comida y que queríamos cancelar la cena.
Nos dijeron que ya era imposible cancelarlo a 24 horas vista puesto que el gasto estaba hecho. Le dijimos que no habíamos visto por ningún lado la política de cancelación ni siquiera lo mencionaron en el email de confirmación de la reserva.
Insistían e insistían de que no podíamos cancelarlo y teníamos que pagarlo y ya una de las dos personas nos comentó que le habían dicho en dirección que si cancelábamos la cena que nos teníamos que marchar del hotel, que todo o nada. Eso nos pareció un chantaje para la fecha que estábamos y le dijimos que íbamos a la policía para comunicarlo.
No encontramos cerca ninguna comisaría abierta pero sí hablamos por teléfono con ellos y nos dijeron que si no era una estafa, que realmente no lo era, no podíamos poner una denuncia, que eso era tema de consumo, que no aceptáramos el chantaje y que pusiéramos una hoja de reclamación.
Con lo cual nos pusimos a preguntar en todos los hoteles cercanos si tenían alguna habitación para las tres siguientes noches, encontramos en un par de ellos pero con la suerte que el Hotel B&B en la Rúa de Alfonso XII, nº 11, muy cerquita del nuestro, también muy bien ubicado, atendido por una chica argentina simpática, servicial y amabilísima y con parking concertado, nos ofreció, por un precio similar, dos habitaciones separadas y además una de ellas era una suite, nos pareció increíble el cambio, así que lo reservamos y fuimos a hablar con las señoras de nuestro hotel y a recoger las maletas.
Les dijimos que como la policía nos había dicho que no aceptáramos el chantaje y que pusiéramos una hoja de reclamación, era lo que íbamos a hacer y siguiendo sus instrucciones del "todo o nada" nos marchábamos, creo que en el fondo se sintieron muy apenadas porque se tiraron el farol y pensaban que no íbamos a encontrar nada a esas horas para unos día tan señalados, e insistieron de que al menos nos quedáramos esa noche, le dijimos que no, recogimos nuestras maletas y nos fuimos para el nuevo Hotel.
Finalmente decidimos no hacer nada con la hoja de reclamaciones porque después de todo, nosotros habíamos salido ganando y ellos eran los perjudicados aunque nos hicieran perder una par de horas de nuestras mini-vacaciones.
Muy contestos y felices por el cambio, nos fuimos a cenar al mismo restaurante donde habíamos comido la hamburguesa, Cafetería ECO y aunque cayó un chaparrón mientras estábamos cenando, fue la única lluvia que cayó en los tres días que estuvimos en Galicia, también tuvimos mucha suerte con esto.
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