30 jun 2018

CIRCUITO OESTE AMERICANO - CAPÍTULO XI - SAN FRANCISCO

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CAPÍTULO XI - SAN FRANCISCO


DÍA 11º) Viernes - 15/06/2018

Hoy era todo el día en la ciudad de San Francisco, en principio teníamos pensado visitarla a nuestro aire, pero Paul nos ofreció una excursión opcional que comprendía: 

Mostrarnos algunos lugares interesantes de la ciudad, llevarnos hasta un punto donde poder divisar y fotografiar el Golden Gate, cruzarlo caminando y llegar hasta Sausalito donde tendríamos un poco de tiempo libre y regresaríamos a la ciudad en barco, pasando por delante de la famosa isla de Alcatraz y dejándonos a la hora de comer en el Pier 39.

Como todo el grupo se apuntó, decidimos irnos con ellos y no separarnos. También pensándolo bien, esta excursión no fue cara (40 $ = 34€ aprox.), si nosotros hubiéramos hecho todo esto por nuestra cuenta hubiéramos tardado mucho más tiempo y probablemente nos hubiera costado más.

A las 08:00 en el bus, el recorrido de la excursión hasta tomar el ferry que nos llevó al Puerto de San Francisco, fue el siguiente:


Fotos desde el autobús desde el Hotel a la calle Lombard por las diversas calles que pasamos, Union, Taylor, Hyde, etc.







Primera parada en la calle Hyde para ver y cruzar caminando desde arriba la famosa calle Lombard.



LOMBARD STREET

Lombard es una larga calle que se extiende por la parte norte de San Francisco, desde el parque Presidio hasta la Coit Tower, pero su famoso trecho en zig-zag (27 curvas), se encuentra en la colina Russian Hill, muy cerca del tramo alto de la Avenida Columbus, entre las calles Hyde y Leavenworth. 

Para superar el elevado desnivel de esta colina, con 27 grados de inclinación, en 1922 se decidió hacer un diseño de los 400 metros de calzada, incorporando pronunciadas e inclinadas curvas, las cuales se combinan con zonas ajardinadas. 

Es conocida como la calle más empinada de San Francisco, donde cada día cientos de turistas se acercan para fotografiar su cuesta de 40 grados de inclinación. 

Aunque Lombard Street no es realmente la calle más empinada de la ciudad, sí es la más conocida como tal. 
Su atracción principal es ver a los coches bajando  como si se tratara de una montaña rusa. Es protagonista de numerosas películas.


  







  



   



Esta visita no es que la considere imprescindible, pero sí curiosa ya que la hemos visto en algunas películas, como por ejemplo en Vértigo de Alfred Hitchcock y siempre hace ilusión ver las cosas al natural.

Lo ideal para verla es desde su parte baja bien desde los altos de algún edificio cercano o en un entarimado alto, pero principalmente sin turistas y llena de coches bajando. Una utopía, o quizás viviendo tu propia experiencia desde el interior de un vehículo.


Continuamos con el tour, la siguiente parada fue en el Palacio de Bellas Artes. De este lugar no había oído hablar ni visto ninguna imagen con lo cual fue una sorpresa, tanto a nivel paisajístico como arquitectónico.

PALACIO DE LAS BELLAS ARTES

El Palacio de Bellas Artes (Fine Arts), situado en el distrito de La Marina, en la parte norte de la ciudad, cerca del famoso puente colgante Golden Gate. 

Se trata de un palacete situado junto a un lago, el cual se construyó en 1915 para una Exposición del Pacífico, y cuyo estilo arquitectónico está inspirado en el clasicismo de Grecia y Roma. 

De hecho es una de las pocas construcciones supervivientes de dicha exposición, la cual en realidad fue reconstruida en 1965 tras ser demolido el anterior palacio. 
A la vez que dicha reconstrucción se llevó a cabo el diseño del entorno ajardinado y el lago que le rodea. 
El Palacio de Bellas Artes es un conjunto arquitectónico en forma de pérgola, con una rotonda central y unas columnatas, todo en estilo clásico.

    

  






   






  

   



Volvimos al autobús, la siguiente parada sería en uno de los puntos donde se puede divisar la majestuosidad del famoso puente, concretamente desde Fort Point, Long Ave Marine Dr.


Fotos desde el autobús camino de Fort Point











GOLDEN GATE
El Golden Gate Bridge es un puente colgante que se extiende sobre el Golden Gate, estrecho del mismo nombre, de una milla de ancho (1,6 km) que conecta la Bahía de San Francisco y el Océano Pacífico . 
Ha sido declarada una de las maravillas del mundo moderno por la Sociedad Americana de Ingenieros Civiles . 
La guía de viajes de Frommer describe el puente  como "posiblemente el puente más hermoso, sin duda el más fotografiado del mundo".   
En el momento de su apertura en 1937, fue tanto el más largo y el más alto puente de suspensión en el mundo, con un tramo principal de 4.200 pies (1.280 m) y una altura total de 746 pies (227 m ).
Más fotos desde el autobús. Lo cierto es que ver el Golden Gate entre tinieblas también tiene su encanto.





Vistas del Golden Gate desde Fort Point











 
Con la imagen de este vehículo parecía que estábamos protagonizando una película de los años 50/60.






De allí nos dirigimos al Centro de Información Turística que se encuentra a la derecha justo antes del comienzo del puente. 



En ese lugar fue donde nos dejó el autobús para que nosotros pudiéramos recorrerlo a pie por sus amplias pasarelas. Fue una experiencia espectacular. 


Cartel en el Centro de Información Turística




El clima de San Francisco y principalmente en su bahía no nos permitía disfrutar mucho del paseo, con frío, viento y la neblina, pero había soñado tantas veces estar allí y verlo con mis propios ojos que perdonaba cualquier inclemencia del tiempo.



  










  






Torre sur vista desde la pasarela, con elementos Art Deco







   
      





    



Al finalizar (dirección Sausalito), a la derecha, hay un área de descanso (H Dana Bower Rest Area). La zona es de forma ovalada, donde hay aparcamientos para los que vayan en coche puedan hacer una parada y ver otro punto de vista del puente y también ahí es donde nos recogía de nuevo el bus.



Espectaculares vistas del Golden Gate también desde este lado (norte).


   




Monumento dedicado al Cuerpo de la Marina, con la estatua del Marinero Solitario, en Vista Point (Área de descanso H Dana Bower )



Al llegar a Sausalito nos dejaron en el parking delante de la terminal del ferrry.

Nos fuimos a pasear por su calle más cercana al puerto, la calle Bridgeway, no se ni siquiera si es la principal, lo cierto es que nos dieron muy poco tiempo y aunque estuvimos en Sausalito, no podemos decir que lo conociéramos. 

Lo que no te dicen al contratar la excursión es que con el tiempo que te dejan libre allí,  no tienes para ver nada. Bueno, lo que yo tenía interés es en ver San Francisco, no Sausalito, pero ya que estábamos allí.....

En el corto espacio que permanecimos, nos tomamos un café con unos dulces en Lappert's Ice Cream (17,12$ los cuatro), vimos algunos escaparates de las lujosas tiendas y en un souvenir aproveché para comprarme un chubasquero o cortavientos más abrigado que el que yo llevaba porque estaba pasando mucho frío.

Sausalito es una ciudad del Área de la Bahía de San Francisco. El nombre significa "sauzalito": pequeña arboleda de sauces. Se caracteriza por su puerto pesquero, el cual ahora tiene un carácter recreacional. 

Situada junto al Golden Gate Bridge, alberga 7,000 habitantes. Adquirió reputación como colonia de artistas y bohemios que vivían en casas flotantes sobre la bahía. Ha sido tradicionalmente escogida por gente famosa y de clase alta como lugar de residencia. En su zona residencial tienen una mansión, por ejemplo, Robin Williams e Isabel Allende. 
Goza de un clima mediterráneo, mucho más benigno que San Francisco al otro lado de la bahía y es un destino turístico muy importante.

Calle Bridgeway de Sausalito




Este cuadro, simplemente me gustó, estaba en una galería de arte de la calle Bridgeway.


No teníamos mucho tiempo para más y el poco que nos quedaba lo dedicamos a pasear por el puerto que el día había despejado un poco y se podían hacer bonitas fotos del mismo y a esperar que llegara la hora acordada para  montarnos en el ferry.







   



Preciosa imagen desde el mar del Hotel The Inn Above Tide, que tiene que ser una pasada alojarse allí con las vista tan espectaculares de la bahía de San Francisco.







   


Ya zarpábamos, veréis como el color del cielo va cambiando, aún estando tan cerca una ciudad de otra, la diferencia de clima que os comentaba antes es notable.





No me quería perder detalle del paisaje, pero hacía un viento tremendo que tenía que agarrarme fuerte a las barandillas.



Desde distintos puntos de la ciudad se divisa a lo lejos la famosa isla de Alcatraz pero ahora desde el barco, la veíamos mucho más cerca.


Alcatraz, que al principio era una isla deshabitada, posteriormente construyeron un fuerte para defensa de las colonias extranjeras, para posteriormente convertirse en una prisión de máxima seguridad, aún así tres de sus presos escaparon y nunca más se supo de ellos.

Funcionó hasta 1963 cuando fue clausurada por motivos de seguridad.

Actualmente la prisión es visitable para turistas, pero tengo entendido que hay que reserva con mucha antelación, de todas formas no teníamos mucho interés en visitarla con el poco tiempo que pasaríamos en la ciudad, tal vez con más días sería una visita imperdible.




Esto fue lo más cerca que estuvimos de Alcatraz.



Con el viaje en barco podíamos disfrutar de las hermosas vistas del horizonte de la ciudad, sus skylines principalmente y el Puente de la Bahía.





Y nos aproximábamos al puerto de San Francisco, terminal de Ferrys.


  


El barco nos dejó en el Pier 33, nos fuimos caminando hacia el  39, el más famoso de los muelles.

El Pier 39 es un embarcadero en el barrio de Fisherman´s Wharf que data de 1905 y fue remodelado en 1978 para parecer un pueblo de pescadores. Actualmente es un gran atractivo turístico donde podemos encontrar tiendas, restaurantes y mucho entretenimiento.



Toda la calle del embarcadero donde se suceden un pier tras otro, se encuentra muy animada tanto de público como de atracciones , esculturas, jardines que fuimos mirando y fotografiando hasta llegar al pier 39 con su gran edificio de dos plantas lleno de tiendas de todo tipo, restaurantes y cafés, donde entramos para elegir un restaurante para comer.












Desde el segundo piso del pier 39 se divisaban las torres más altas de la ciudad.





Para comer no tardamos mucho en decidirlo porque en cuanto le echamos un vistazo a este, nos gustó. Se trata del Fog Harbor

  



Este es uno de los platos más famosos de San Francisco, el "Cioppino" y que nos recomendó nuestro guía.




Por lo que veis, no hace falta que os diga que la comida fue fantástica, todo riquísimo, el servicio muy bueno, el sitio cómodo y luminoso y con una espectaculares vistas.


Totalmente recomendable. Sí es un poco caro, había platos más económicos pero era nuestro homenaje ya casi al final del viaje y disfrutamos de una exquisita comida a base de mariscos con unos fantásticos amigos en un lugar inolvidable.

Al terminar de comer nos dimos un paseo por las tiendas del pier y entramos concretamente en la de chocolates Ghirardelli, super famosa en la ciudad y había verdaderas maravillas en chocolates, también un poco caros pero estaban buenísimos, ahí se me quitó todo el agobio de qué llevar de regalo a la familia, en esta ocasión, todos degustarían los famosos chocolates Ghirardelli.

Nuevas vistas al mar, con Alcatraz al fondo y el barco de la II Guerra Mundial atracado en el pier 45.





También este pier es famoso por la colonia de leones marinos que tienen allí su hábitat.


Docenas de criaturas tomando el sol, jugando y disfrutando del agua que ofrecen un espectáculo muy interesante.














Arco del muelle 45 En esta zona se encuentran el submarino Pampanito y el barco Jeremiah O'brien,  para quien desee visitar estas joyas de la Segunda Guerra Mundial.


Fisherman´s Wharf

Junto al distrito de La Marina, la zona de Fisherman´s Wharf surge en el siglo XIX, cuando genoveses y sicilianos instauraron la industria pesquera en San Francisco. Ocupa el espacio del antiguo puerto pesquero extendiéndose por la calle Jefferson y el Embarcadero.


Había comercios de todo tipo pero este me llamó la atención porque parece ser que comprabas la ostra y la chica la abría delante tuya y si tenía perla, te quedabas con ella.


Seguimos por Fisherman Word hasta el final de la calle donde se encuentra la terminal del cable car, entre las calles Jefferson, Hyde y Beach. Allí hay una especie de rotonda donde muy manualmente da la vuelta el tranvía más famosos del mundo, ayudado por dos de sus empleados.


Junto a esa terminal también se encuentra el cartel de Ghirardelli, célebre por su gran iluminación nocturna que se ve desde los barcos que se aproximan al puerto, en el lugar donde estaba ubicada antiguamente la fábrica del famoso chocolate.


El cable car tiene 3 rutas que cubren algunas de las zonas más interesantes de San Francisco: el distrito financiero, Nob Hill, Chinatown, North Beach, Russian Hill o Fisherman’s Wharf.


Como no queríamos irnos sin probar la experiencia de montarnos en uno de ellos, cuando llegamos a este punto, había una cola tremenda, sí pero allí estábamos entretenidos entre que uno viene, da la vuelta y otro que se va....

Compramos el ticket, creo que eran 7$ cada uno. Pretendíamos hacer el trayecto de la foto de abajo, desde la terminal donde estábamos a la de Market St esquina con Ciryl Magnin en pleno centro, pero al final, cansados de tanto esperar, tomamos desde allí mismo otro que iba para el barrio chino (y nos ahorramos un buen trozo de cola) y nos bajamos unas paradas antes, cerca de Union Station.








Sentadas en la parada del cable car esperando que avanzara la cola.



Algunas fotos de los tranvías que iban y venían así como los que giraban para dar la vuelta ayudados por sus operarios.








Ya por fin dentro, que guay cuando vas cuesta abajo, luego me cambié a la parte exterior pero un empleado gruñón no me dejaba mover el brazo para hacer fotos desde ahí.





Nos bajamos cerca de nuestro hotel porque el tranvía se dirigía a China Town, como he comentado antes, al pasar por Market St. donde vimos a la gente en esa terminal guardano la misma cola que nosotros habíamos hecho en la otra.




  




En la misma calle Market, entramos en un lujoso centro comercial con una bonita cúpula, llamado Westfield, donde en uno de los restaurante de la segunda planta, nos tomamos una tapas y nos marchamos para el hotel.


  

Tienda de Appel en Union Square. Supongo que todas las del mundo serán iguales porque las que vimos en Japón tenían exactamente el mismo diseño.


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